Después de leer estas líneas no serás el mismo, y es que toda buena historia tiene un inicio, un punto de partida, y este, debe ser lo suficientemente persuasivo como para cautivar al lector. Si estás aquí, seguramente has escuchado el concepto de Brand Storytelling, o por lo menos te causa curiosidad.
Antes de comenzar, remontémonos un poco al pasado. Desde la época primitiva, el hombre desarrolló la necesidad de comunicarse con pinturas rupestres que contaban sus hazañas para que las tribus nómadas supieran que alguien estuvo ahí.
El tiempo ha transcurrido, evolucionado nuestra forma de comunicarnos, impulsándonos a descubrir nuevas maneras de contar todo lo que tenemos en la cabeza de manera diferente al resto. Lo mismo pasa con las marcas, cada una trae consigo una personalidad que la define y destaca entre la competencia.
Pero, ¿es suficiente? En la actualidad, los grandes gurús del marketing nos han dicho que debemos crear conexiones que trasciendan en acciones. ¿De qué manera podemos lograrlo a través del Branding?
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El Brand Storytelling llega a nosotros como una chispa que detona esa emoción que queremos evocar en el consumidor. La narrativa va más allá de lo que obvio, resalta todo aquello que hace especial a la marca, metiéndose en la médula del mensaje, para terminar tocando el corazón del espectador.
¿Cómo empezar? Si todo fuese tan fácil como tomar una hoja de papel o sentarse frente al monitor. Realmente nadie dijo que este proceso sería fácil, sin embargo, te compartiré algunos secretos que te ayudarán a entrelazar tus ideas para tejer un sinfín de BrandStories.
Toda idea necesita cimientos y para crear necesitas contexto. ¡El contexto es importante! Por ello, debes tener muy claro todo lo que quieres abarcar en tu storytelling, partiendo de un concepto creativo, el cual será esa irresistible gran idea que dará vida a tu branding de manera distintiva y memorable.
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¿Qué quieres contar? Tal vez se trata de una marca exclusiva de relojes que necesita transmitir un estilo de vida lleno de lujo y opulencia; o una marca de aparatos electrónicos que necesita salirse de la caja. Todo dependerá del concepto que desees desarrollar.
Para emocionar, debes emocionarte, accionar la nota persuasiva en tus textos utilizando una emoción. Incluso si es una emoción negativa, puedes lograr que se trasmita todo lo contrario.
Las razones, emociones y sensaciones de tu público son también tus herramientas, y es lo mismo que tú llevas dentro. Los redactores emplean estímulos, mientras que los consumidores solamente reciben el estímulo a través del BrandStory.
La escritura tiene que ver con observar y expresar lo que se observa. Ver a la gente, entender su contexto e indagar hasta alcanzar un insight que perdure. Los mejores insights se encuentran en la calle.
El Brand Storytelling es el arte de contar una historia usando lenguaje sensorial permitiendo a los oyentes interiorizar, comprender y crear su significado personal a partir de ello.
Las marcas que alcanzan el éxito son las que cuentan algo que convence y enamora. Para cautivar a tu público debes contar una historia lo suficientemente:
¿Quién dijo que las narrativas deben tener canto, editorial y portada? No necesitas millones de cuartillas, el principio de la redacción creativa es decir lo que quieras utilizando pocas palabras. Recuerda que las mejores historias suelen ser breves y se cuentan por sí solas, sin tantas vueltas.
IF ANY IDEA TAKES LONGER THAN 15 SECONDS TO EXPLAIN, KILL IT.
KEEP IDEAS BRIEF.
Puedes emplear múltiples recursos para conservar la atención de tus espectadores, comenzar con una frase lo suficientemente misteriosa para mantenerlos al borde de sus asientos, o tal vez, bajarte del estrado y hablarles de frente con libertad.
Una vez definido el Storytelling, se trabaja en el mantra y en el manifiesto, estos dos elementos son la síntesis de todo lo anterior, el clímax de tu narrativa. Pues el manifiesto refleja el alma del proyecto, y el mantra engloba todo el concepto de la marca, destacándose como parte fundamental del proceso de branding.
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Nunca olvides que escribes para personas, ten en cuenta que tu público experimenta sensaciones y ha vivido cosas diferentes a ti. Es esa “vida” la que debes replicar en tus BrandStories.
Las palabras transmiten emociones, la palabra también crea acciones de compra y atrae a las personas. Con tus narrativas debes crear memorabilidad, popularidad y tendencia; pues una cosa es segura, las mejores marcas siempre tienen algo que contar.
¿Qué historia cuenta la tuya?